bizantino, Imperio

Imperio de Europa sudoriental y meridional y Asia occidental.

Inicialmente, se constituyó en torno a la ciudad de Bizancio, que se había desarrollado a partir de una antigua colonia griega fundada en la ribera europea del Bósforo. La ciudad fue conquistada en 330AD por Constantino I, quien la volvió a fundar con el nombre de Constantinopla (ver Estambul). Ya en esa época la región se denominaba Imperio romano de Oriente. A la muerte de Constantino en 395, Teodosio I dividió el imperio entre sus dos hijos. La caída de Roma en 476 puso fin a la parte occidental del Imperio romano; la mitad oriental continuó existiendo y fue denominado Imperio bizantino, con Constantinopla como su capital. El reino oriental se diferenciaba del occidental en muchos aspectos: heredero de la civilización surgida de la época helenística, tuvo mayor desarrollo urbano y mercantil. Su más grande emperador, Justiniano (r. 527–565), reconquistó parte de Europa occidental, construyó la basílica de Santa Sofía y publicó la codificación básica de la legislación romana. Después de su muerte, el imperio se debilitó. Aunque mucho después de la muerte de Justiniano sus gobernantes continuaron tratándose a sí mismos como "romanos, el término "bizantino describe con mayor exactitud el imperio en la etapa medieval. La larga controversia sobre los iconoclastas (ver iconoclasia) dentro de la Iglesia oriental preparó a esta última para su quiebre con la Iglesia romana (ver cisma de 1054). Durante la controversia, los árabes y turcos selyúcidas incrementaron su poder en la región. A fines del s. XI, Alejo I Comneno solicitó la ayuda de Venecia y el papa; estos aliados convirtieron las cruzadas siguientes en expediciones de pillaje. En la cuarta cruzada, los venecianos se apoderaron de Constantinopla y establecieron una generación de emperadores latinos. En 1261 fue recapturada por los bizantinos exiliados y el imperio quedó reducido a poco más que una ciudad-estado. En el s. XIV, comenzó la invasión de los turcos otomanos; su largo sitio de Constantinopla terminó en 1453, cuando el último emperador murió combatiendo en los muros de la ciudad y la región cayó bajo control otomano.